EL TEATRO DE HISPANOAMERICA – 1
GRUPO LA ZARANDA: LOS QUE RIEN ÚLTIMOS.
Teatro Nacional Cervantes (Sala María Guerrero), Julio de 2008.
No se trata, por supuesto, de la España única del franquismo, ni siquiera de las dos españas que nombró Antonio Machado, hay muchísimas otras, tantas que España, en lo esencial, es lo que surge del tejido de sus diferencias. Por eso, las apreciaciones sobre la alta, y mucho más habitualmente, la baja calidad del actual Teatro Español que abundan en nuestro medio, atienden exclusivamente a Madrid o Barcelona y resultan, no sólo pedantes, también reveladoras de una profunda ignorancia sobre las teatralidades, varias y hasta formal e ideológicamente contrastantes, que se manifiestan a lo largo y lo ancho del Estado Español. El Grupo La Zaranda constituye quizás el ejemplo más elocuente, por la gran repercusión que ha alcanzado en toda América Latina. En ocasión de que, para un festival internacional de 1995, nos visitaran con “Obra póstuma”, Clarín tituló: “Lo mejor que se vió de la escena mundial. Un lujo”.
Este “Teatro inestable” nació en Jerez de la Frontera (Andalucía, La Baja) en 1978 y en su historia caben dos etapas muy precisas: la del nacimiento y la intuición que llega con Juan Sánchez, como autor y director, a su máximo esplendor y, ya en los 90, la que definen Paco de la Zaranda, actor y director en ocasiones, y Eusebio Calonge, como dramaturgo. No cambia, la percepción de una forma de vivir, de un dolor oscuro, de una cierta sacralidad, sin la cual el arte flamenco es mera andaluzada, lo que si se modifica es la perspectiva, porque la Historia – pese a su final tan anunciado- transcurre despiadada y conmina a ahondar el pensamiento o a repetirse, y La Zaranda ahonda, sin desencanto pero obligándose, en palabras de Calonge- “a abrir de nuevo la puerta a la Metafísica” ya que el mundo del post capitalismo ha abolido la sacralidad de las cosas.
Para la ocasión, el elenco estuvo constituido por: Gaspar Campuzano, Enrique Bustos y Francisco Sánchez, con la voz en “off!” de Juan Pedro Carrión. Textos e iluminación: Eusebio Colange. Textos y Dirección: Paco de la Zaranda.
EL DOCUMENTAL – 2
EL MUNDO ES UN ESCENARIO. Un viaje personal por el Teatro.
(ALL THE WORLD´S A STAGE. One man’s journey through the Theatre)
3. AHORA VIENE MI COMEDIA: La comedia acompañó en Grecia los últimos decenios de los grandes trágicos y alcanzó con Menandro una significación universal. La herencia es recogida por Plauto y Terencio y, así, es la comedia romana la que termina de definir el espíritu de lo que en occidente entendemos como teatro: al terror y la piedad se suma la carcajada, irreprimible ante la imitación de los actos humanos.
4. LOS MISTERIOS: El paso de las representaciones de la pascua y la navidad en las iglesias, a los misterios de la pasión representados a la luz del día, en plazas y mercados, más que una explicación de la contradictoria historia del teatro de la Edad Media, nos proporciona indicios de la irreductibilidad de los impulsos elementales del teatro primitivo, de las fiestas populares, del instinto congénito de la representación.
Escrito, dirigido y presentado por Ronald Harwood.
LAS PUESTAS HISTÓRICAS DEL SIGLO XX – 2
LA SEÑORITA JULIA
(Fröken Julie, 1951)
El Dramaten, el gran teatro sueco es uno de los espacios paradigmáticos de esa idea de Teatro Nacional, que, como muchas otras ideas trascendentes, puede formularse con extrema sencillez: la posibilidad de ser universal está en reconocerse en un lugar concreto del mundo, o, más simple aún: pinta tu aldea. Los orígenes del Dramaten se remontan a finales del XVII cuando Gustavo III, un rey ilustrado, lanzó la idea de un espacio dramático de afirmación del ideal y la cultura nacional, su historia es larga y sinuosa pero registra cuatro nombres excepcionales, los de Olaf Molander, Alf Sjöberg e Igman Bergman, responsables de lo mejor de su andadura institucional y artísticas, y el de August Strindberg el demiurgo sin el que cual –y sin subestimar a otros importantes autores- es inimaginable el teatro sueco.
La Señorita Julia (con su famoso prólogo, en el que se la define como “tragedia naturalista”) acerca a Suecia las ideas de Emile Zola y del Theâtre Libre de André Antoine.
Alf Sjöberg en su puesta en escena de 1949, con Inga Tidblad y Ulf Palme, utilizó por primera vez el texto original, limpio de las agresiones a las que había sido sometido por impresores, censores, etc.… La adaptación cinematográfica de esa puesta (la que hoy les proponemos) causó sensación y ganó en 1951 el Gran Premio en el Festival de Cannes. Anitta Börjk, la nueva y muy joven Julia, es, desde entonces, el modelo referencial de un personaje tan reconociblemente sueco como universal.
País: Suecia
Director: Alf Sjöberg
Guión: Alf Sjöberg (Obra: August Strindberg)
Música: Dag Wirén
Fotografía: Göran Strindberg
Con: Anita Björk, Ulf Palme, Märta Dorff, Lissi Alandh, Anders Henrikson, Inga Gill, Åke Fridell, Kurt-Olof Sundström y Max von Sydow.
EL TEATRO ARGENTINO DE HOY – 1
FINAL DE OBRA (2006)
La literatura rioplatense es, sin duda un venero estimulante para Ricardo Bartis. De hecho está allí, para ser homenajeada y también para leerla mediante omisiones y paradojas “En el pecado que no se puede nombrar” la provocación partía de Roberto Arlt, el narrador convertido a la dramaturgia por el teatro independiente de los años 30 de quien, sin embargo, elegía como punto de partida dos novelas: “Los siete Locos” y su consecuencia: “Los lanzallamas”. Armando Discépolo, el creador del grotesco criollo lo inspiró con su “Muñeca”, obra ésta, sin embargo, mucho más afín a la comedia sentimental que al grotesco canónico, “De mal en peor” (*) cuyo proceso de elaboración y puesta en escena recoge este “Final de Obra” de José Glusman, parte del mundo dramático de Florencio Sánchez, cuyo ciclo se cumple entre l891 y 1909. De la definición de tipos, del color local, incluso de la ética del autor uruguayo, queda, si se la encuentra, la recurrencia al tópico familiar como espejo, como metáfora de un tiempo y un espacio. Cuando, en experiencias anteriores, Bartis partió de Shakespere o de Beckett, sus presencias eran mucho más elocuentes, lo que, contra lo que pueda suponerse, subraya la coherencia de Bartis (que sostiene que pertenecemos a un país con una tradición teatral envidiable) con los usos y el espíritu del actual teatro argentino.
Dirección, guión y producción ejecutiva: José Glusman
Fotografía: Daniel Roiz. Montaje:Emiliano Serra. Música: Carmen Baliero
(*)DE MAL EN PEOR con dramaturgia de Ricardo Bartís, fue estrena por el Sportivo Teatral en abril de 2005. Fueron sus intérpretes: Cecilia Peluffo, Agustín Rittano, Marta Pomponio, Carlos Defeo, Claudia Cantero, Luciana Ladisa, Flora Gró, Federico Martínez, Alberto Ajaka, Andrea Nussembaum y Matías Bringeri. Vestuario: Magda Banach. Música: Carmen Baliero. Espacio y dirección: Ricardo Bartís.